¿Sabías que España, con más de 931.568 hectáreas destinadas al cultivo de la vid, es el país con mayor extensión de viñedo de la Unión Europea y del mundo?
Pues en muchas de esas hectáreas estamos en plena época de vendimia o recolección de la uva. Veamos cómo se lleva a cabo.
El calor adelanta la vendimia
La uva no se recoge en todos los lugares a la vez, ya que en general es el clima el que marca el inicio de la vendimia. A grandes rasgos, la temporada se estrena en julio en las Islas Canarias y Andalucía y termina a mediados de octubre en la Rioja y Galicia. Septiembre suele ser el mes de la vendimia por excelencia, aunque el aumento global de las temperaturas está adelantado esta labor o moviendo los viñedos a las faldas de las montañas.
¿Sabias que la vendimia se hace ahora unos 15 antes de lo que se hacía hace 50 años?
La uva se recoge cuando está ya madura. Esto se sabe haciendo un seguimiento del peso, la cantidad de azúcar, la acidez y el color de las uvas, hasta que alcancen los valores adecuados para el tipo de vino que se quiera elaborar.
Útiles para vendimiar a mano
La vendimia puede hacerse a mano o con máquinas cosechadoras especiales. Hoy en día, todavía lo más habitual hacerla a mano por varias razones. Quizás el motivo principal es que la inmensa mayoría de los viñedos están plantados y podados para recoger la uva a mano, como se lleva haciendo desde hace siglos.
También puede darse el caso que los responsables de bodegas de renombre quieran seleccionar solo los mejores racimos, para elaborar así vinos de alta calidad. Y eso, de momento, sólo lo pueden hacer vendimiadores expertos revisando cada cepa.
Cuando las vides están podadas en vaso, como ocurre en grandes extensiones de nuestro país, no queda otra que vendimiar a mano. Los vendimiadores utilizan un cuchillo curvado en forma de hoz, llamado corquete o tranchete, para arrancar los racimos y un cesto o capacho para ir echando los racimos. También se emplean tijeras de podar, ya que cuando se trabaja rápido es más fácil hacerse cortes en las manos.
Cosechando con vendimiadora
Para cosechar con máquinas vendimiadoras es necesario que los viñedos estén podados en espaldera. La máquina avanza cubriendo las plantas y golpeando suavemente los racimos con unos bastones. La uva cae a unos depósitos que se irán vaciando en el tractor cada cierto tiempo. Puedes ver como funciona en esta entrada.
Las máquinas vendimiadoras cosechan en mucho menos tiempo. Por ello, además de reducir costes de mano de obra, permite que la uva llegue a la bodega sin que haya empezado a fermentar. Otra ventaja es que puede trabajar en plena noche, lo que permite recoger la uva con una menor temperatura, lo que beneficia a la calidad final del vino. Estas y otras ventajas mejoran la calidad final del vino sin aumentar demasiado los costes de la vendimia.
Finalmente, la uva llega a la bodega donde le tocará a enólogos y operarios hacer su trabajo. Nosotros aún tendremos que esperar un poco para poder disfrutar de una copa de vino.
Otras entradas que te podrían interesar:
Un repaso al término y a muchos dichos castellanos que lo incluyen en
ABECEAGRARIO: VIÑA
La forma de podar la vid influye mucho en la manera de recoger las uvas. Lo cuento en
DE LAS FORMAS DE LAS VIDES
Una vez recogida la uva, van directas a la bodega. Pero antiguamente se llevaban al lagar, del que hablamos en esta entrada: ABECEAGRARIO: LAGAR
Un concepto muy importante a la hora de decidir cuando se cosecha: ABECEAGRARIO: ENVERO